Description
Summary:Las permanentes transformaciones del actual milenio han evidenciado que uno de los fenómenos globales de mayor consideración es la movilidad humana, presente desde el inicio mismo de la historia de las sociedades, pero fortalecida exponencialmente en el transcurrir de las últimas décadas. Mientras factores multicausales alientan la salida de poblaciones enteras de sus comunidades de origen, los países de destino afrontan los desafíos adjuntos a la presencia masiva y reiterada de extranjeros en sus territorios. Por eso, la migración se presenta hoy más que nunca como un fenómeno multimodal, complejo y sistémico que requiere la atención de los distintos sectores sociales, políticos y culturales.Si bien Colombia ha sido principalmente un país expulsor de migrantes, debido al recrudecimiento persistente del conflicto armado interno y otros factores, las recientes oleadas migratorias venezolanas están exigiendo de manera sistemática no solo la profundización en el debido campo de estudio, sino los alcances de las decisiones gubernamentales y la respuesta humanitaria ante estos grupos poblacionales. La comodidad de una nación que añora arraigar el “proyecto del mundo único” se fragmenta inevitablemente ante la escena inédita de cientos de caminantes por las carreteras del país, de nuevas hordas de desposeídos en las ciudades con sus cuadros de una agónica humanidad, sintonizados con los silencios hundidos en el Mediterráneo o en el azaroso tránsito de millares entre Centroamérica y Estados Unidos.