Summary: | El uso de herbicidas en cantidades mayores a las necesarias frecuentemente está relacionado con las diferentes propiedades de textura del suelo, las pendientes pronunciadas y condiciones climáticas que favorecen las pérdidas de herbicidas por lixiviación y escorrentía (aguas de lluvias). Esta situación incrementa el riesgo de contaminación del suelo y agua superficial. Por esta razón, es necesario prevenir la contaminación mediante la liberación lenta de los herbicidas y de esta forma reducir el impacto ambiental de los productos fitosanitarios aplicados sobre el suelo. El suelo con bajo contenido orgánico tiene una baja capacidad de disminución de la movilidad de los productos fitosanitarios y, por lo tanto, la lixiviación aumenta y con ello el riesgo de contaminación. Para la liberación controlada de pesticidas se emplean materiales que reducen la movilidad del ingrediente activo [1]. Los organoarcillas son buenos adsorbentes de pesticidas y se han utilizado como “carriers”, portadores para el diseño de formulaciones de pesticidas [2].
|